jueves, 25 de julio de 2013

Diván

Porque tengo ganas,
me siento a escribir cosas problemáticas,
a saludar al mundo en versos sin fragancias,
me complico la vida con rimas infinitas,
rimas como las que brillan ausentes hoy.

Porque me sale así,
es costumbre ya en mis días preguntar,
es una linda manera de hacerme crecer,
de obligarme a ver algo más de lo real,
sin pretender ser más realista que el rey.

Por un cigarro apagado,
el olor a tabaco que adueñado de mi cuarto,
me va avisando que es hora de ir despidiéndome,
del último de los malos hábitos que me van quedando,
de la otra vida que supe vivir entre húmedos estragos.

Porque encuentro equilibrio,
hay cosas que se me notan hasta caminando,
cuando miro a los ojos a las personas extrañas,
y me bajan la mirada como sufriendo mis ojos,
a mí que me importa, si no son honestos ni felices.

Y entre tanta incertidumbre,
les cuento a todos que lo hago porque quiero,
aunque me corten los dedos,  mi voz dará garabatos,
de amor y sufrimiento, de recuerdos de alguna guerra,
de ansiedades insufribles, de cansancios de mujeres.

Al final de todo saldrá bien,
por eso voy tranquilo quemando puentes de porcelana,
aunque el tiempo esté empecinado en demorar las agujas,
las llamas del camino que dejé, me alumbraran para recorrer,
y si no sale cuando quiero, es solo porque aún queda café por beber.

martes, 16 de julio de 2013

Y no respondes

Te vi pasar delante mío una mañana,
y me miraste sin reconocer mis ojos,
me excusé para seguirte si escapabas,
y regalaste un rechazo a mis piropos.

Me soporté entre los alambres espinados,
querer buscarte fue batalla para dioses,
si me trampearon los regalos agremiados,
y nuevamente verte ausente muchas noches.

Y salgo herido,
y no respondes,
te busco por las calles donde vivo,
pero en la vida siento que te escondes,

En tu silencio,
no hay rincones,
buscando verte entera en este lienzo,
apago mis sutiles pretensiones.

¿En donde está la estrella que me hace de guía?,
Si en estos días todo el cielo esta apagado,
y cuando sufro en las mañanas de agua fría,
en el espejo veo intentos despreciados.

Quiero tentarte como nunca te han tentado,
para que veas que egoísta es lo que siento,
estoy cansado de tanto haber caminado,
pero algo dice que no cese mis intentos.

Y sigo herido,
y no respondes,
te busco en otras calles que transíto,
aunque sufrir con tus andares me hace hombre.

Con tus miradas,
das sensaciones,
por más que mis rodillas den cansadas,
podré olvidarte entre todas mis canciones.

No hay

Tantos años sueltos,
tanta fuerza sin igual,
¿es acaso un vuelto
que me culpes al pasar?

No hay amor en tu andar,
ni canción que ha de curar,
tu costumbre de llorar,
tus sonrisas sabor cal.

Miles de monedas,
lanzandose a la mar,
piensas, cuando mueras,
este frío va a cesar.

Y se va tu corazón amargo,
tus modas tan siniestras,
las manchas en tus brazos,
la potencia de no estar.

Quieras o no quieras,
la vida va a triunfar,
esa es la fiel escuela,
que al final te enseñara.

Verás que en madrugar,
hay más que el frío,
verás que solo con andar,
podrás hacer camino.

lunes, 15 de julio de 2013

Esquivando tu ausencia

Niña,
que te ocultas entre ausencias,
que poco sabes de mí,
y en mis sueños te presentas.

Olas,
sacudiendo vestiduras,
que guardas lejos de aquí,
y me esquivas con tus dudas.

Sientes,
el momento tan distante,
que el viento carga en su voz,
susurrando algo de antes.

Y aunque en tus motores haya inviernos,
me quiero cerca de ti, cerca entre retazos,
piensa que un camino entre lamentos,
traerá la sombra hacia ti, sombra en latigazos.

Niña,
que entre estrellas vas brillando,
que no lo ves ya lo sé,
que lo cuento con mis cantos.

Tiempos,
desvanecen en arenas,
de un viejo y sucio reloj,
de una cartera con penas.

Cartas,
que te escribo y me reservo,
para que pienses en mí,
olvidando aquellos miedos.

Y entre las paredes que levantas,
las flores van a crecer, entre las bisagras,
cuando no piensas y puertas destrancas,
el corazón va a explorar, la nueva mañana.

sábado, 13 de julio de 2013

Victoria

Podrido de tener que fumar derrotas,
Soy el indicado para hablar de ellas,
cuando se trata de juegos de pelotas,
supe perder a orillas de las más bellas.

Y aunque mi nado siempre fue sagaz,
mi resistencia me flaqueó en la clave,
en el instante donde la quiero usar,
mi cuerpo y mi cabeza cierran con llave.

Será que le tomé el sabor al perdedor,
de no poder hacer alarde de mi estado,
de saber mis límites con la transpiración,
sabor a mugre, sabor a logro de fracasado.

Siempre un jugador de toda la cancha,
asistente y compañero en el principio,
cerebral y motivante de la buena tranza,
insolente e irresponsable en el último tiro.

Pero hoy estoy cansado de fumar derrotas,
así que hace un tiempo me propuse mejorar,
y aunque vos ni nadie me quieran dar pelota,
preparen los pañuelos, que hoy salgo a ganar.

miércoles, 10 de julio de 2013

Algoritmo

Es fácil,
dices que sí,
tomo tu cintura,
caminas delante de mí,
abro la puerta para salir,
caminamos entre palabras,
sorteamos las baldosas flojas,
seguimos las flechas de las flechadas,
nos divertimos con las anécdotas,
nos avergonzamos de alguna que otra,
abro otra puerta pero para entrar,
tomo tu cintura para hacerte pasar,
suspiro la ráfaga de perfume que dejas,
retiro tu abrigo, retiro la silla y te invito,
me siento frente a ti y me pierdo,
en tu mirada suave y áspera a la vez,
que no se esconde cuando la tiento,
las palabras que van pasando y la orden,
el café que va por la mitad y la cuenta,
y las horas han pasado como ratos,
el dinero yace sobre la mesa mezquino,
por si las moscas me avisa del final,
tomo tu abrigo para abordarte,
salimos juntos a la puerta,
ya abrir la puerta sabes,
ya mis ojos se empañan,
se termina este sueño,
te llevo donde digas,
te dejo con respeto,
me despido dulce,
pero anudado,
¿viste che?
era fácil.

Manotazos

En tu ausencia me encontré escribiendo,
en algunas noches duras y muy frías,
en momentos donde desperté muriendo,
esperando esa respuesta tan merecida.

Pero cansado de mis escasos argumentos,
de hilar fino dentro de cada palabra,
de la incertidumbre de este gris invierno,
que además de frío, no ha traído nada.

He intentado controlar mis impulsos,
y he triunfado en respetar tus misterios,
pero mi tinta está impaciente de uso,
y me ha prohibido rogarte por mas besos.

Me ha obligado a reservarme algunas rimas,
a condensar las gotas del vapor matinal,
enseñándome a soportar las duras espinas,
de las rosas que se regalan, y se regalan mal.

Pudiendo dar un corazón sin vueltas,
entregándolo todo solo por verte brillar,
me encontré escribiendo en tu ausencia,
en una tarde que está fría, pero al menos está.

martes, 9 de julio de 2013

Espejos de colores

No te confundas con las serpentinas,
que no te preciso, ni necesito de ti,
que el papel picado y las luces tímidas,
son apenas una muestra que te ofrecí.

Que me gustaría sentirte a mi lado,
de mi mano acompañando tus pasos,
protegiendo tus sueños del afano,
relojeando a los tiranos en abrazos.

Acariciar en una noche tus cabellos,
peinar tus mejillas con mis labios,
susurrarte imposibles entre fuegos,
hacer que grites con tus encantos.

Pero de ahí a depender de tu persona,
como depende la roca de arena y mar,
como un linyera que protege su zona,
hay gran trecho y no lo quiero caminar.

lunes, 8 de julio de 2013

Una tarde en mis brazos

¿Quién fue el que encendió tus sueños,
para enseñarte a dejarlos solos y sueltos?
¿Quién endulzó su vida con tus mieles,
para amargar tus alas y evitar que vueles?

¿Qué truhán aseguró ser todo tu destino,
solo para poder esconderte del camino?
¿Qué ser más sombrío oscureció tu día,
vendiendo noches como fuente de vida?

Preguntas del montón que me pregunto,
sentidos sin razón que hoy son mi asunto,
resuenan sin tambores en mis poros,
tan listos y astutos que corren a todos.

Respuestas que no llegan en mis canas,
palabras del país de las no pronunciadas,
historias más cercanas que un vecino,
aireándose te invitan un buen vino.

Que tus sueños son para ser hoguera,
debes saberlos listos contra quimeras,
que tus mieles son más dulces si son tuyas,
desde el aire las regalas como finas musas.

El truhán que jure ser tu vida a olvidarlo,
que el camino es a tu lado y no guiando.
Que las sombras son buenas en verano,
bajo un árbol, y a los besos en el prado.

miércoles, 3 de julio de 2013

Ni bronceada, ni aburrida

Suelta, hidalga, valiente,
saluda sin temor al superior,
elude los siniestros gerentes,
dejando un rastro de dulce olor.

Aquella rubia inteligente y monumental,
que a todos los tipos tiene atrás,
no piensa ni un segundo en aflojar,
no frena ni un primo a descansar.

Y atrás de sus negocios hay misterios,
los guarda y los esconde del mirón,
es claro que ninguno será su dueño,
factible es que ella se adueñe de vos.

Y atrás de sus negocios vengo quieto,
no hay nuevas novedades general,
la espera por sus labios en silencio,
más que entrenarme, me hace mal.

martes, 2 de julio de 2013

Ella nos llenaba de barrio

De sed se están hartando,
mientras tanto ven tu sombra,
y cuando vienes caminando,
la inspiración pasa por tonta.

Que les falta un argumento,
a tanto gil que sin motivos,
va cansando los intentos,
de querer salir contigo.

Es que,
sus barcos naufragan llegando a tus costas,
sus pieles embargan y caen en tus aguas,
sus miedos les ganan y ninguno nada.

Como,
te mueves difícil en sus artimañas,
las balas esquivas con raras miradas,
la música apagas y ninguno nada.

Y se olvidan del lamento,
de las tardes más viajadas,
nada de eso lo creen cierto,
como si nada importara.

Es que nos pasa muy seguido,
eso de ser todos cantantes,
de ir y luchar con poco oído,
a un par de piernas danzantes.

Porque,
parece supieras las calles de mi cuadra,
sorteando palabras de mucha vergüenza,
guiñándome sonrisas y a ninguno nada.

Sabes,
que son pocas veces las que salió buena,
y si bien, si te cansas será de juguetes,
acá en esta cuadra ninguno dará tregua.


lunes, 1 de julio de 2013

Incendio

Che,
ahora que tengo tu mirada,
digo, leyendo este incendio,
te cuento de esas llamas,
que arden en silencio,
que arden con ganas,
y explotan si te pienso,
son tanto incontrolables,
como me mires y sonrías,
que se saben inmortales,
estrellándose bien vivas,
rojas, naranjas, encendidas,
abrigarán todos tus sueños,
el día que me lo pidas.