miércoles, 13 de noviembre de 2013

Tangaco Indigno

Nunca me canso de tirar le tiempo,
parece que disfrutara,
cada minuto que se ahoga mintiendo,
con cada hora con nada,
para pasar raya y caer en la cuenta,
que estuve en vano conociéndola,
invirtiendo las pocas horas escuetas,
para quedar vacío de primaveras.
Y eso que ando perfumado y prolijo,
no como algunos que son indignos,
en deportes soy de jugar fuerte y limpio,
si no es deporte, aveces parezco un niño.

No hay caso,
me quedo con los retazos,
de charlas envenenadas,
con mis manos ensangrentadas
y con el corazón al plato.
Algún día,
cuando te sientas tranquila,
y no sea tan insistente,
tendras ganas de verme
y descubrir que me he salvado.
Mientras tanto,
me quedo como macho,
apretándome las muelas,
por mucho que me duela,
no has querido volar alto.
Hoy rescato,
leyendo que sos injusta,
son admirables las putas,
veo que aman por un rato,
y vos no sos un buen tangaco.


No hay comentarios:

Publicar un comentario